‘‘ No sé Porqué me Echo Bilongo’’

VOZ 1: Lindo.
Todo lo que me pedía
un masaje yo se lo daba
y cuando salía de casa
siempre triste me dejaba.

Yo no más que me bebía
el café que ella colaba
y no más que comía
lo que ella me cocinaba.

Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
Ay, ay, ay,
me echó bilongo.

Yo no sé por qué razón
si yo le enseñé a querer,
le entregué mi corazón,
fui yo quien la hizo mujer.

Pregunto, quiero entender,
lo consulto con mi congo.
no me dice ¿por qué
Tomasa me echó bilongo?
No me dice ¿por qué
Tomasa me echó bilongo?

Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
Ay, ay, ay,
me echó bilongo.

Ah, caray
Sí, señor.
Vaya que aguaje.

CORO: Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
VOZ 1: Pero que mira si la quiero mucho
que todo lo que me pide en la boca se lo pongo.
CORO: Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
VOZ 1: Me tenían amarrado con fe,
me tenían pero nunca me solté.
CORO: Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
VOZ 1: Déjame decirte que todas las mañanas
me consulto con mi congo.
CORO: Ay, ay, ay,
me echó bilongo.
(…)