VOZ 1: Nací con suerte dijo el patrón,
en tierras de miel y abundancia
y el cambio supo Mamá Yunay
mi fruta dulce es amarga.
Mi padre fue un trabajador
muy orgulloso y altivo,
pero por ser miembro de la unión,
hoy lo han desaparecido.
Y si no sienten el hambre,
de probar mejor vida,
y aunque mis ojos se cansen,
deseos me hacen
que siga.
CORO: Yo no recogeré fruta amarga,
yo no recogeré fruta amarga.
VOZ 1: Tengo a mi hermana, quien va a soñar,
ahora trabaja a mi lado,
sobre la tierra de otro señor
nuestro sustento tengamos.
Pero primero es que oigo gritar,
voces de acento extranjero,
hablan de guerra y de que hay que pagar
la deuda externa primero.
Pero de un hombre nuevo vendrá
para limpiar las mentiras,
vendrá la llama de la libertad
a iluminar
nuestras
vidas.
CORO: Yo no recogeré fruta amarga,
yo no recogeré fruta amarga.
Yo no recogeré fruta amarga,
yo no recogeré fruta amarga.
(…)